Introducción
a la Toxicología Forense
Toxicología es la parte de la
química que se ocupa de las sustancias que introducidas al organismo, por
alguna de las vías que luego enumeraremos, ocasiona daño a la salud en mayor o
menor grado.
De acuerdo a lo anterior, tóxico
es cualquier sustancia de naturaleza orgánica o inorgánica, que introducido
a un organismo vivo puede ocasionar daño. En numerosas ocasiones esta propiedad
de ocasionar trastornos está relacionada con la cantidad de la sustancia
incorporada, es decir de la dosis.
Muchas sustancias en
determinadas cantidades no tienen efectos tóxicos, eventualmente pueden llegar
a ser terapéuticos, sin embargo cuando estas cantidades son superadas pueden
producirse efectos indeseados. Es común en sustancias medicamentosas apreciar
esta propiedad, es por ello que debe diferenciarse dosis tóxica de dosis terapéutica. En un medicamento, cuanto más
separada esté una de la otra más eficaz y más seguro será el mismo, aquellos
medicamentos que tienen ambas dosis muy cercanas son riesgosos para su
utilización.
Se define dosis tóxica
como la cantidad de sustancia con la cual pueden evidenciarse los efectos
nocivos, si la dosis es suficiente los daños pueden ser irreversibles
produciendo la muerte del sujeto receptor, como las variaciones en las
cantidades necesarias para producir el óbito pueden variar con relación a
diversos sujetos se habla de dosis letal
50, definiéndose como la dosis que
produce la mortandad en el 50 % de sujetos de un lote de experimentación.
Cuando se definió
toxicología se mencionó que las sustancias deben ser introducidas en el
organismo, eso significa que las mismas deben ser absorbidas y distribuirse por
el torrente sanguíneo para desarrollar su acción tóxica. En efecto hay
sustancias que por sus características aun ingeridas no ejercen su efecto por
no ser absorbidas, es el caso del Mercurio metálico, el cual tiene efecto
tóxico cuando es inhalado y sin embargo si es ingerido, por no ser absorbido en
el tracto digestivo, no ejerce su efecto
tóxico. Recordemos que antiguamente se utilizaba ingerirlo en caso de
obstrucciones intestinales, pues es eliminado intacto por vía fecal.
Vías
de introducción de sustancias tóxicas.
a)
Vía oral. De esa manera pueden ser incorporadas
sustancias tóxicas en estado líquido o sólido, pudiendo producirse la absorción
en la mucosa del tracto digestivo a partir de la mucosa bucal, estomacal y/o
intestinal.
b)
Vía parenteral, por inyección ya sea subcutánea, intramuscular
o más comúnmente intravenosa, de esta manera se introducen numerosas sustancias
toxicomanígenas, que por supuesto cumplen con la definición de tóxicos.
c)
Vía inhalatoria, por esta vía se introducen numerosos tóxicos
volátiles como gases o vapores, ya se mencionó el caso del Hg que por su
elevada tensión de vapor se absorbe en función de su alta volatilidad como
vapor de Hg. También podría incorporar en este caso a la Cocaína que es
inhalada en estado sólido aprovechando su fácil absorción en la mucosa nasal.
d)
Vía rectal, esta vía utilizada en terapéutica con la forma
farmacéutica, supositorios. Con frecuencia constituye vía de intoxicación en el
caso de sujetos que se introducen envoltorios de plástico de forma cilíndrica
con drogas de abuso intentando pasar de esa manera los controles aduaneros produciéndose
por accidente la ruptura de los mismos con la liberación del material contenido
y la correspondiente intoxicación por sobredosis.
e)
Vía vaginal, del mismo modo que la anterior suele
utilizarse terapéuticamente con óvulos. En el tema que nos interesa se utiliza
la cavidad vaginal para el transporte de envoltorios como los mencionados,
también para superar las barreras aduaneras y policiales en él trafico de
drogas.
f)
absorción cutánea, no es de lo más común pero
puede suceder que una sustancia pueda superar la barrera cutánea
accidentalmente, fundamentalmente cuando la dermis esta alterada, por lesión
y/o erosión de la piel.
Tipos
de intoxicación.
Las intoxicaciones
pueden ser intencionales o accidentales,
y por el tipo de dosis utilizada las
podemos clasificar en agudas o crónicas.
Un intento de suicidio
será entonces una intoxicación
intencional y aguda, pues obviamente existen las dos circunstancias el
voluntarismo por parte del suicida y la necesidad de una dosis elevada para
asegurar el objeto deseado.
También un intento de
homicidio por envenenamiento será una intoxicación intencional, pero aquí puede darse la circunstancia de agudo o crónico según la dosis
utilizadas para lograr el objetivo.
El envenenamiento
con Cianuro de Sodio, generalmente es con una dosis alta para lograr la muerte con una
sola ingesta, sería el caso de la pena capital en cámara de gas o el sonado
caso de Yiya Murano y sus tres víctimas muertas con confituras conteniendo esta
sal.
El segundo caso
sería, el ya comprobado envenenamiento
de Napoleon en la Isla de Santa Elena,
utilizando arsénico como droga tóxica, suministrándolo en pequeñas
cantidades reiteradamente, produciendo el deterioro paulatino del sujeto
intoxicado hasta lograr su deceso. Casos similares se han visto también con
Talio, el cual era suministrado a la víctima paulatinamente con el objetivo de
producir el deceso tras un largo periodo de deterioro orgánico.
De manera similar
pueden diferenciarse intoxicaciones accidentales de uno u otro tipo. Las agudas en el caso de accidentes
industriales con derrames, o escapes de sustancias tóxicas en cantidades
masivas que afectan en mayor o menor grado a operarios y/o población civil
presente en la zona afectada. Por ej. Podríamos citar el caso de intoxicación
con CNH hace unos años en Avellaneda, producido por emanaciones de este gas
desde las cloacas en donde por desidia, ignorancia o indiferencia se había
producido derrames de soluciones de cianuro y también derrames ácidos que
permitieron la realización de la reacción de generación del gas cianhídrico.
Las intoxicaciones accidentales crónicas también son
frecuentes en actividades industriales, en donde sin haber intencionalidad
existe una exposición reiterada al agente tóxico provocando una incorporación
lenta y paulatina del elemento intoxicante. Se podría citar aquí la exposición
al plomo en la industria de cerámicas y
pinturas y también el sonado caso de la impregnación masiva de bebes al
Mercurio en el año 1982, por la utilización de pañales reutilizables
comercializados por una empresa llamada Pañalera.
Elementos
a analizar para detectar una intoxicación
El tipo de muestra a
utilizar para la detección de una intoxicación determinada variará según las
circunstancias como podemos enumerar.
En una situación de intoxicación aguda, ya sea accidental o
intencional, los materiales a utilizar para tratar de evitar la muerte de la
víctima, podrán ser: contenido estomacal, para lo cual se efectúan los lavados
correspondientes, vómitos, sangre u orina de la víctima, materiales de diversos
tipos halladas en donde se encontró al sujeto, vasos, restos de comida o bebidas, medicamentos,
polvos sospechosos, etc., en el caso de accidentes se debe tener en cuenta los
elementos utilizados en el sector en donde se produjo el accidente. Encarando en cada caso el tratamiento químico
correspondiente.
Si la intoxicación ha
sido mortal, a los materiales mencionados previamente debe sumarse las vísceras
producto de la autopsia, en estos casos generalmente los materiales más
utilizados son: contenido estomacal, hígado, riñón, con menor frecuencia
también suele utilizarse cerebro (Pesticidas)
y pulmón. (Cianuros). En general
el órgano utilizado dependerá del tipo de tóxico que se busca. En algunos casos
se utiliza sangre obtenida por punción de grandes vasos o corazón que aún luego
de 48-72 hs puede hallarse sin coagular
(Alcoholes varios, fundamentalmente etanol – metanol).
Diferentes tipos de
muestras procesadas en análisis toxicológicos.
1)
Toxicología forense
·
Estómago.
·
Contenido estomacal
·
Sangre
·
Pulmón
·
Hígado.
·
Cerebro
·
Vesícula biliar
·
Bilis.
·
Humor vítreo
·
Hisopados nasales, vaginales y
rectales
·
Pelos
·
Uñas
·
Piel
a)
Provenientes de exhumaciones.
·
Fauna cadavérica.
·
Huesos.
·
Tierra del cajón
b)
Provenientes del lugar del hecho.
·
Bebidas
·
Alimentos.
·
Comprimidos.
·
Medicamentos en general.
·
Pelos
·
Ropas
·
Manchas
2)
Toxicología ambiental
·
Venenos volátiles.
·
Efluentes líquidos
·
Residuos sólidos.
3)
Toxicología Alimentaria.
·
Estudios bacteriológicos.
·
Estudios micológicos.
·
Micotoxinas
·
Aflatoxinas
·
Conservantes
·
Colorantes
4)
Toxicología clínica.
·
Sangre
·
Orina.
·
Vómitos.
·
Contenido gástrico.
·
Pelos
5)
Drogas de uso penado
·
Cocaína
·
Marihuana.
·
LSD
·
Barbitúricos.
·
Opio, heroína, morfina.
· Anfetamina y derivados. Metanfetamina y derivados anfetamínicos de
anillo sustituido.
·
Otras.
Clasificación
de Tóxicos.
Se pueden clasificar
en:
Tóxicos volátiles. (CO, CNH, etanol, metanol, acetona,
formol, compuestos organo-clorados, nitroderivados, benceno, hidrocarburos en
general, etc.)
Tóxicos metálicos. (Arsénico, Mercurio, Antimonio,
Bismuto, Plomo, Talio, Cadmio, Manganeso, Aluminio, etc.)
Tóxicos orgánicos fijos. (Pesticidas
organoclorados y organofosforados, barbitúricos, hidantoinas, glutetimidas,
carbamatos, analgésicos, anfetaminas, benzodiacepinas, alcaloides, anestésicos,
etc.)
Procesamiento
químico analítico de tóxicos
En química en general
y en toxicología en particular, es necesario para proceder a la correcta
identificación cualitativa y a una adecuada medición cuantitativa separar la
sustancia que se desea detectar y/o cuantificar del medio en el cual se la
investiga. Es decir lo que denominamos la separación de la matriz.
En el caso que nos ocupa la separación de los
distintos tóxicos de las matrices que hemos mencionado: materiales biológicos,
sangre, orina, vómitos, contenido estomacal, vísceras, restos alimenticios y de
diversos tipos presentes en la escena del evento, etc. es un aspecto de
fundamental importancia y que se encara según el tipo de tóxico que se
investiga.
Así, en el caso de Tóxicos volátiles, se aprovecha su
propiedad de pasar fácilmente al estado vapor para separarlo del resto de los
componentes de la muestra. Este procedimiento puede limitarse a conservarlo en
un recipiente hermético, a temperatura
ambiente o ligeramente calefaccionado, de modo que el tóxico pase a la fase
vapor, de donde luego lo tomaremos como corresponda para su análisis o también
efectuar un tratamiento más enérgico mediante una destilación directa o por
arrastre por vapor, (Dibujar
esquemas) reteniendo los vapores obtenidos mediante el procedimiento con una
solución apropiada, en un recipiente
refrigerado.
En el caso de Tóxicos metálicos, se aprovecha su
característica inorgánica, para proceder a la destrucción de materia orgánica
de la matriz (Mineralización), de modo de obtener una solución de sales que
tendrá en su composición el catión
correspondiente al veneno en cuestión como nitrato o sulfato, el cual es
entonces investigado sin las interferencias probables de los componentes
orgánicos.
Finalmente en el caso
de Tóxicos orgánicos fijos, se aprovecha su mayor afinidad en solventes
orgánicos que en solventes acuosos,
los que generalmente constituyen
la matriz en donde se produce la investigación, de modo que por un
procedimiento de extracción con solventes se produce el traspaso de los
tóxicos de una fase a la otra en donde luego se procede a la investigación
adecuada.
Investigación de tóxicos
volátiles.
Se denominan así a
aquellos compuestos o elementos de trascendencia toxicológica que
independientemente de su estado físico, pueden separarse del material que los
contiene mediante destilación directa o por arrastre con vapor de agua. Los
mismos generalmente penetran al organismo por vía inhalatoria o por ingestión,
es por ello que su investigación puede efectuarse según los casos en sangre o
en orina, en tejido pulmonar o en aire expirado. Entre ellos podremos citar el
CO (monóxido de carbono), el CNH (Acido cianhídrico) y los cianuros alcalinos,
el CH2O (Formol), el NH3 (amoniaco), algunos alcoholes como el etílico y
metilico, (etanol, metanol), diversos solventes orgánicos (éteres, aldehídos,
cetonas), compuestos bencénicos (Tolueno, Benceno), solventes clorados,
(Cloroformo, cloruro de etilo, cloruro de metilo), compuestos nitrogenados
(Nitrobenceno, nitrotolueno). Por supuesto que a esta lista podríamos agregar
numerosos compuestos más constituyendo los mencionados una pequeña enumeración.
El aislamiento de los
compuestos así calificados puede operarse en medio acuoso-ácido o en medio
acuoso-alcalino, de acuerdo con sus propiedades químicas. La separación en
medio acuoso-ácido permite aislar la mayoría de los compuestos de importancia
toxicológica, mientras que la destilación en medio alcalino promueve ciertas
descomposiciones que inciden en la investigación analítica toxicológica por su
manifiesta interferencia, sobre todo con material alterado.
Comenzaremos por
detallar dos sustancias que existen normalmente en estado gaseoso y que
generalmente actúan en este estado de agregación: CO y CNH y que por lo tanto
no requieren habitualmente el tratamiento mencionado precedentemente.
Monóxido de Carbono (CO)
Se trata de un gas
inodoro e incoloro, que se produce por combustión incompleta del Carbono o
sustancias Hidrocarbonadas en presencia de insuficiente cantidad de oxígeno. Es
por ello que es frecuente en épocas invernales debido a las bajas temperaturas
que fuentes de calefacción inadecuadas como braseros, o incluso artefactos de
gas con funcionamiento defectuoso y carencia de adecuada ventilación generan
este tipo de intoxicaciones por inhalación. Este compuesto inhalado
conjuntamente con el aire ve formando una combinación con la hemoglobina, que
se denomina carboxihemoglobina, que es mucho más estable que las combinaciones
del grupo hemo con el oxígeno y el anhídrido carbónico en la respiración
normal, esta estabilidad genera que paulatinamente mayor cantidad de
hemoglobina se combine con el monóxido sustrayéndose al mecanismo normal de
intercambio gaseoso de la respiración. Simultáneamente, producto de la carencia de aporte de oxigeno
se genera un aumento en el ritmo respiratorio lo que ocasiona el agravamiento
de la situación, paralelamente se desarrolla una somnolencia que dificulta la
comprensión por parte de la persona que sé esta intoxicando de tal situación continuando
el proceso mencionado.
La carboxihemoglobina
(Hb.Fe.CO) posee una coloración carminada intensa, lo que provoca en los
afectados una coloración rosada, fundamentalmente en sujetos de raza
blanca, que dista muchísimo de la
palidez cadavérica habitual, por lo
tanto este aspecto impresiona al perito orientándolo hacia la causa del
accidente o intoxicación, fundamentalmente si el porcentaje de
carboxihemoglobina supera el 30 %. Asimismo durante la sesión de la autopsia la
pigmentación de los órganos, (cerebro, corazón, pulmones y músculos estriados),
está notoriamente incrementada, lo que también alerta a los médicos legistas.
En casos de muertes
las muestras de sangre deben obtenerse lo antes posible, del corazón o de las
venas de gran calibre, como la femoral, en donde es más probable encontrar aún
sangre no coagulada. Se ha demostrado que el CO no es absorbido post-mortem y,
por lo tanto, la determinación en sangre constituye un índice de su contenido
en el momento del deceso.
La determinación de
monóxido de carbono, rara vez requerida en la clínica toxicológica, puede ser extremadamente importante en
situaciones forenses. Esto es verdaderamente particular en investigaciones de
muertes con incendios. La presencia o ausencia de carboxihemoglobina ha sido
utilizada como un indicador de si el fallecido estaba vivo o muerto, al
comenzar el incendio. Este problema impone una rigurosa demanda en el análisis
de presición en determinar concentraciones por debajo del 10 % de
carboxihemoglobina.
Análisis
a)
Ensayo de dilución (Haldane).
Se preparan dos soluciones de concentración similar (1 %), una con
sangre normal y otra con la sangre en estudio. Se observan simultáneamente en
recipientes similares, con luz natural, difusa. La sangre normal presentará
color rojo amarillento, mientras que la muestra, de contener Hb.Fe.CO
(carboxihemoglobina) en concentración suficiente presentará un color carminado
neto.
b)
Ensayo alcalino.
En un tubo de ensayo limpio
y seco colocar III a V gotas de la sangre en estudio y en otro similar igual
número de gotas de sangre normal, agregar 15 ml de agua destilada a cada tubo,
mezclar bien, incorporar luego a cada tubo V gotas de sol. de hidróxido de
sodio al 10 %, mezclar bien, se observará que la sangre normal acusa color
castaño a castaño verdoso, por la presencia de hematina alcalina, mientras que
la sangre con Hb.Fe.CO, (más de 10 %),
permanece un tiempo con la coloración carminada.
c)
Identificación espectroscópica.
Las soluciones de oxihemoglobina (Hb.Fe.O) al 1-2 %,
observadas al espectroscopio presentan caracteres identificativos en la zona
visible del espectro, entre las rayas D y E. La carboxihemoglobina (Hb.Fe.CO)
presenta un espectro similar aunque desplazado. La posibilidad de identificar
la carboxihemoglobina por vía espectroscópica depende de la concentración de
pigmento, poder resolutivo del prisma, etc., generalmente conviene efectuar
observaciones simultaneas con diluciones de sangre testigo mediante el
acoplamiento al espectroscopio de prismas de reflexión total.
En estas condiciones la dilución de oxihemoglobina
presenta dos bandas de absorción: una alfa (ubicada a la izquierda) entre 586 y
566 mu, y otra beta, (ubicada a la derecha), entre 550 y 528 mu, con máximos en
576.9 y 540,4 respectivamente.
La carboxihemoglobina presenta la banda alfa entre 580
y 560 mu y la beta entre 546 y 526 mu, con máximos respectivos a 570 mu y 538
mu.
Como podemos apreciar las diferencias no son demasiado
significativas, por lo tanto es necesario poseer una línea de referencia que
puede hacerse por volatilización de una sal de sodio o contando con un retículo
desplazable en el ocular que permita alinear el retículo con la banda alfa de
la dilución de sangre normal y luego presentar la dilución de la sangre con
carboxihemoglobina, con la que podremos apreciar el pequeño desplazamiento.
Mucho mas efectivo es la aplicación de un prisma de
reflexión total aun con espectroscopios de bajo poder resolutivo, pues permiten
ubicar el espectro sobre el ocular y aprovechando la reflexión total una imagen
del mismo, por supuesto entonces invertida, en un nivel inmediatamente
superior, con lo cual invertimos las posiciones de las bandas alfa y beta, si
hacemos coincidir la banda alfa en ambos con sangre normal, dado que la imagen
reflejada la podemos desplazar,
observaremos un conjunto de tres bandas, pues la alfa ya hemos dicho que
coincide en ambos espectros superpuestos, si ajustamos así el dispositivo y
luego reemplazamos por la dilución de sangre con carboxihemoglobina veremos la
no-coincidencia de la banda alfa por lo tanto observaremos cuatro segmentos y
eso es definitorio.
d)
Determinación cuali o
cuantitativa de CO en sangre por microdifusión
Para ello
utilizaremos una Cámara de difusión de Conway. La misma es una caja de vidrio,
de cierre hermético, que posee en su base un tabique que separa la misma en dos
círculos concéntricos, de manera de poder colocar en ambas partes dos líquidos
diferentes sin que se mezclen, pero de manera que la cámara aérea de ambas sea
común y de esa manera puedan difundir sustancias volátiles entre las dos
soluciones.
Para el
ensayo propuesto se coloca en el compartimento externo 1 ml de sangre, en el
compartimento interno 2 ml de una solución de cloruro de paladio, constituida
por cloruro de paladio en ácido clorhídrico 0.01 N, finalmente sobre la sangre
agregamos 1ml de solución de ácido
sulfúrico al 10 %, como agente liberante. Se cubre con la tapa asegurando un
cierre hermético y se deja en reposo una hora a temperatura ambiente. Si en el
sector central donde se coloco el reactivo no hay cambio puede considerarse un
resultado negativo. De existir monóxido de carbono, aparecerá una pátina
grisácea de Paladio metálico.
Se puede
cuantificar titulando el Pd++ sobrante con una solución de IK.
e)Determinación de
carboxihemoglobina.
Se basa en la separación física de la Hb.Fe.CO
de otros derivados de la Hb.Fe.O2.
Wolff desarrolló un procedimiento de valoración
de la HB.Fe.CO basado justamente en la mayor resistencia térmica de este
derivado en condiciones rigurosas, controladas. Así, indica que un
calentamiento a 55 oC durante 5 minutos exactos provoca en muestras
de sangre saturadas de Hb.Fe.CO la precipitación de escasa o trazas de material
coloreado junto con otras proteinas incoloras. Al respecto declara Wolff que, de
observarse color, ello es imputable a un fenómeno de coprecipitación. La sangre
exenta de CO tratada en las condiciones señaladas produce un filtrado amarillo
pálido libre de hemoglobina.
Eliminados la Hb.Fe y otros componentes
precipitables por este tratamiento térmico, la Hb.Fe.CO puede evaluarse por
diferentes vías. Se advierte, acorde con la información que se ofrece, que los
mejores resultados se obtienen si la muestra original se divide en dos
fracciones y una de ellas es saturada con CO, la cantidad relativa de CO en
ambos sobrenadantes será proporcional al por ciento de saturación de la muestra
de sangre en estudio. Puesto que los sobrenadantes pueden acusar manifiesta
turbiedad, se recomienda efectuar diferentes lecturas en el máximo de absorción,
donde la absorción es mínima. Es de señalar que el método de Wolff modificado
es utilizado en los laboratorios de U.S.A.
Material necesario.
a) Generador de CO, es recomendable
mediante el tratamiento de ácido fórmico o formiato de sodio, tratados por ácido
sulfúrico conc.
b) Baño de agua. Termostato controlado,
calentado eléctricamente, de manera de mantener invariable la temperatura en
55±0.5 oC durante 5 minutos.
c) Centrífuga. Se menciona que aunque
la filtración es posible la demora hace que sea recomendable centrifugar a 5000
r.p.m. en dispositivo para 4 ó más tubos
de 10 – 15 ml de capacidad.
d) Espectrofotómetro. Se indica un
filtro colorimétrico para 570 – 630 nm
e) Solución reguladora. Buffer acetato.
Solución I: en matraz aforado de un
litro, colocar 300 g de ácido acético y completar a 1 litro con agua destilada.
Solución II: 408 g de acetato de
sodio cristalizado (CH3COONa.3H2O) en un litro de agua destilada.
Mezclar un volumen de sol. I y 3
vol. de sol II, llevar a un litro.
pH 5±0.5
f)
Solución
“antiespúmica”. Usar de buena calidad. En frasco de vidrio colocar una fracción
del producto y agregar agua destilada, colocar unas “perlas de vidrio”, cerrar
bien y agitar vigorosamente. No usar alcoholes superiores pues desnaturalizan
la molécula de hemoglobina.
Preparación de la solución sanguínea.
En tres tubos identificados A, B y C, se
colocan 0.5 ml de sangre, al denominado A, sangre sin CO (Blanco), al
denominado B, la sangre en estudio y al C, la sangre en estudio saturada al 100
% con CO sintetizado a partir de formiato de sodio y ácido sulfúrico. Se agrega
a cada uno de los tubos 2 ml de agua destilada.
Pasar un ml de cada una de estas mezclas a tres
tubos nuevos, limpios y secos.
Agregar a cada uno 4 ml del buffer de Wolff (pH
5.05)
Colocar en baño de agua a 55oC
Dejar enfriar
Filtrar
Leer la absorbancia en Espectrofotómetro a 538
y 570 mu.
Cálculos
La saturación relativa de la muestra de sangre
original se calcula mediante la ecuación
% Hb.Fe.CO = (A538 – A570) Solución
sanguínea no tratada X 100
(A538
– A570) Solución sanguínea saturada
Acido cianhídrico y
cianuros alcalinos.
Las intoxicaciones con ácido cianhídrico pueden
suceder de manera accidental o intencional, el ácido cianhídrico es un gas a
temperatura ambiente, que se produce de manera sencilla por hidrólisis de
cianuros alcalinos (Na o K), estos últimos
tienen amplia aplicación
industrial en metalurgia, galvanoplastía e industria minera.
También se lo utiliza para aplicar la pena de
muerte en la cámara de gas. En todos los casos la producción del ácido
cianhídrico se debe a la hidrólisis ácida de los cianuros con un ácido mineral
como el Clorhídrico por ej. La acción del ácido sobre los cianuros libera el
CNH que como gas es inhalado y de manera casi inmediata produce la muerte por
inhibición inmediata de la cadena respiratoria celular. La dosis tóxica de esta
sustancia oscila entre 50 y 100 mg. En algunos casos de manera intencional se
ingiere o se suministra CNNa o CNK, el cual es rápidamente absorbido
produciendo el óbito muy rápidamente. En todos los casos de muerte por cianuros
o ácido cianhídrico el material visceral presentará un particular olor a
almendras amargas, característico del cianhídrico. Se debe aclarar que un
porcentaje de las personas carece de la percepción de dicho olor, por lo tanto
se recomienda dada la potencia tóxica del mismo no insistir en tratar de olerlo
en estos casos pues paulatinamente se producirá una mayor parálisis transitoria
del nervio olfatorio y la inhalación del mismo puede causar efectos riesgosos
como ya hemos mencionado dada su baja dosis tóxica.
En el material
visceral tanto el agua presente en los tejidos, como la producción de CO2 por
el proceso putrefactivo exacerban la liberación del cianhídrico a partir de los
aniones cianuros.
CN- + H2O
------- HCN + OH-
CO2 + 2 CN-
+H2O---------- 2 HCN + CO3=
La alcalinidad de
hidrólisis en este caso también generará una intensa coloración carminada de
los tejidos, tal como con el CO, pero
ahora acompañada del olor a almendras amargas ya mencionado.
1.
Ensayos cualitativos o inmediatos.
a)
Muestras: Cualquiera
fuere su naturaleza (vísceras, alimentos) deben acondicionarse en recipientes
bien limpios, secos y de cierre
hermético, sin agregado de sustancia
alguna como conservador. El único medio de conservación compatible es el frío
que simultáneamente servirá para evitar la volatilidad del tóxico recordando
que su PE es de 20 grados centígrados y su PF es de 13 grados bajo cero.
b)
Fundamento: La
identificación inmediata del ácido cianhídrico de cianuros alcalinos se efectúa
en forma directa en la atmósfera del recipiente que contiene el material a
analizar. La liberación del ácido cianhídrico se debe a un proceso hidrolítico
que prosigue en variada magnitud según las condiciones del medio
c)
Técnicas:
Ensayo guayaco-cúprico o
de Schonbein
El ensayo se basa en
el aumento del potencial de oxidación de las sales cúpricas al pasar a sales
cuprosas insolubles o poco disociadas. Si al sistema Cu (II)- cianuro, se
acopla un compuesto reductor (resina de guayaco) que por oxidación origina un
derivado coloreado, disponemos de un ensayo identificativo.
Reactivos:
a)solución acuosa de sulfato de cobre al 0.5 %
b) solución alcohólica de resina de guayaco al
10 %, de reciente preparación.
Material
necesario
a)papel
de filtro de 2 x 15 cm
b) cápsula de porcelana.
Procedimiento:
Se humecta el papel de
filtro de 2 x 15 cm con la solución de sulfato de cobre 0.5 % hasta 1/3 de su
longitud empleando una cápsula de porcelana, escurrir el exceso y luego
humectar con la solución de resina de guayaco al 10 %. Colocar el papel en el
ambiente interior del recipiente que contiene el material a analizar, de estar
presente el ácido cianhídrico el papel pasa de color castaño a azul en forma
inmediata.
Interferencias:
a)oxidantes directos de la resina de guayaco.
b) reductores que actúen de la misma forma que
el cianuro sobre las sales de cobre.
Valor analítico del ensayo: Tiene valor cuando es negativo, ya
que es una reacción inespecífica. Cuando es positivo requiere confirmación por
ensayos específicos.
Sensibilidad: Es un ensayo
altamente sensible. Según algunos autores permite reconocer hasta 0.25
microgramos de ácido cianhídrico.
Ensayo con o-toluidina.
El ensayo se basa en
la misma interpretación dada para el de guayaco-cúprico. El color azul es
imputable a un derivado de estructura meriquinoide, similar al que produce la
bencidina.
Reactivos:
a)solución
acuosa de sulfato de cobre al 0.5 %
b)
solución alcohólica de O-toluidina al 1 %
Material necesario
a)papel
de filtro de 2 x 15 cm
b)Cápsula
de porcelana
c)Varilla
de vidrio
Procedimiento:
Se humedece la tercera
parte del papel de filtro con la solución de sulfato de cobre al 0.5% y luego,
mediante una varilla de vidrio, extender sobre la superficie humectada I gota
de solución alcohólica de O-toluidina al 1%. Colocar el papel en el interior
del recipiente que contiene el material a analizar. En presencia de ácido
cianhídrico se observa en forma inmediata la formación de una coloración azul
verdoso que rápidamente vira al azul neto. La aparición de color azul tenue por
exposición prolongada no tiene significación analítica.
Interferencias,
valor analítico:
similares a las del guayaco cúprico.
Sensibilidad: Tiene mayor sensibilidad que el guayaco-cúprico.
Alternativa para mejorar la
especificidad de los ensayos anteriores.
Los ensayos anteriores
se basan en la oxidación del cromógeno por acción del catión cuproso, el cual
se origina a partir de la sal cúprica por la acción reductora del anión
cianuro. Es por ello que la presencia de cualquier oxidante volátil,
(Hipoclorito, cloro, etc.) puede
provocar la generación del compuesto oxidado y por ende desarrollar color y
otorgarle a este ensayo el carácter inespecífico
.
Para mejorar
sustancialmente la especificidad del mismo se propone efectuar los ensayos
anteriores invirtiendo el orden de utilización de los reactivos, es decir en
primera instancia exponer el papel impregnado con la sol. alcohólica de guayaco
o con la sol. de o-toluidina, y luego de unos minutos sobre la tira de papel y
sobre la cápsula de porcelana, agregar unas gotas del reactivo cúprico.
Si la coloración es
por un oxidante inespecífico se producirá inicialmente, en cambio si la misma
es por acción del anión cianuro se producirá luego del agregado del reactivo
cúprico, pues recién entonces el mismo reducido a cuproso por la acción del
cianuro será el responsable de la oxidación de la sol. orgánica desarrollándose
el color azul.
Ensayo de Magnin.
Se basa en la
obtención del denominado Azul de Prusia.
Reactivos
a)solución acuosa de hidróxido de sodio al 2 %
b)solución acuosa de sulfato ferroso al 2 %
(Preparación reciente)
c)Acido clorhídrico conc pa.
Material
necesario
a)papel de filtro de 2
x 15 cm
b)cápsula de porcelana.
Procedimiento:
Se impregna el papel
de filtro con la solución de hidróxido de sodio al 2 % y se expone en el
interior del recipiente durante algunos minutos. Se retira y se extiende sobre
una cápsula de porcelana. Se distribuye sobre la superficie expuesta IV gotas
de la solución de sulfato ferroso al 2 %: aparece un precipitado verde,
(hidróxido de hierro II), que se oscurece paulatinamente (hidróxido de hierro
III). Se deja al aire unos minutos para favorecer la oxidación del ion ferroso.
Se acidifica con unas gotas de ácido clorhídrico concentrado. En presencia de
ion cianuro aparece precipitado Azul de Prusia.
Valor analítico
El ensayo de Magnin
constituye un recurso analítico categórico para demostrar la existencia de
ácido cianhídrico dada su especificidad.
Sensibilidad: es un ensayo menos sensible que los descriptos anteriormente.
Transformación en
sulfocianuro
Consiste en tratar el
destilado con exceso de solución de polisulfuro de amonio a ebullición,
reponiendo el polisulfuro si fuera necesario, luego de 5 minutos, se deja
enfriar, se disuelve en agua destilada, se acidifica y se efectúan 3 extractos
consecutivos con eter etílico. Finalmente se evapora la fase etérea a BM y
sobre el residuo se agregan III gotas de solución de Cloruro Férrico, en caso
positivo aparecerá una intensa coloración roja por formación de Sulfocianuro
Férrico. (SCN)3Fe
Aislamiento e identificación del
ácido cianhídrico de cianuros alcalinos.
Cuando se comprueba la
presencia de ácido cianhídrico mediante los ensayos antes descriptos se procede
a su aislamiento y posterior identificación. Para el aislamiento se realiza una
destilación simple o por arrastre con vapor de agua en medio ácido (se
acidifica el material con ácido tartárico al 10 %) recogiendo el producto del
destilado en unos ml de solución acuosa de hidróxido de sodio al 10 %.
adecuadamente refrigerada. Luego sobre
algunos ml del destilado se practica el ensayo ya descripto de Azul de Prusia,
en tubo.
Para ello se coloca en
un tubo de ensayo unos ml del destilado y se agregan IV gotas de la solución de
sulfato ferroso al 2 %. Se calienta suavemente a ebullición hasta aparición del
precipitado de color castaño (hidróxido férrico). Se enfría y se agrega c.s. de
ácido clorhídrico concentrado. En presencia del ion cianuro aparece color o
precipitado azul. En ausencia del mismo aparece color amarillo débil, debido al
ion férrico.
Técnicas cuantitativas:
Muestras: Sangre, orina u
homogenato de vísceras en presencia de fluoruro de sodio al 1% como
conservador.
Fundamento: En la cápsula de
Conway el ácido cianhídrico difunde del compartimento externo al interno siendo
fijado como cianuro alcalino en una solución alcalina. Se toma una alícuota del
compartimento interno y se agrega Cloramina T, formándose cloruro de cianógeno.
Luego por el agregado de piridina se forma cloruro de cianopiridina. La acción
hidrolítica determina la apertura del anillo glutacónico. Si este derivado se
hace reaccionar con ácido barbitúrico se forma un complejo de color lila a
violeta que se lee a 580 nm
Reactivos:
a)Hidróxido
de sodio 0.1 N
b)Ácido
sulfúrico al 10 % en volumen
c)Lubricante:
a base de siliconas o mezclar 2 partes de vaselina sólida y 1 parte de vaselina
c)Fosfato
monosódico 1 M
d)Cloramina
T al 0.25 %. Se guarda en heladera hasta el momento de su uso.
e)Reactivo Piridina-Barbitúrico: en un matraz
aforado de 50 ml colocar 3 g de ácido barbitúrico, 15 ml de piridina y 3 ml de
ácido clorhídrico conc. (deben utilizarse en el orden mencionado). Mezclar
hasta disolución total, llevar a volumen con agua destilada y filtrar.
Material necesario
a)Unidad
para micro difusión según Conway
b)Material
de vidrio de uso convencional en el laboratorio.
c)Espectrofotómetro
visible de buena resolución (1 nm)
d)Cubetas
espetrofotométricas cuadradas de 1 cm de paso de luz.
Procedimiento:
Colocar en el
compartimento interno de la unidad de micro difusión de Conway 3,3 ml de
hidróxido de sodio 0.1 N y en el compartimento externo 2 a 4 ml de sangre total
u orina, o 5 ml del homogenato de tejido (aprox. 1 g de tejido). Como reactivo
liberante se agregan II a IV gotas de ácido sulfúrico al 10 % en el
compartimento externo. Tapar inmediatamente y homogeneizar por rotación.
Tiempo de difusión: 3
a 4 hs a temperatura ambiente. Transcurrido el tiempo indicado se toma 1 ml de
la solución alcalina del compartimento interno y se transfiere a un tubo de
ensayo.
Se prepara un blanco
colocando en otro tubo, 1 ml de hidróxido de sodio 0.1 N.
A cada tubo agregar 2 ml de fosfato monosódico
1 M y 1 ml de Cloramina T al 0.25 %. Mezclar y dejar en reposo 2 a 3 minutos,
agregar por último 3 ml del reactivo piridina – barbitúrico, mezclar y dejar en
reposo 10 minutos. En presencia del ion cianuro aparece un color lila a violeta
cuya absorbancia se mide a 580 nm.
Se compara la
absorbancia con testigos de cianuro de concentraciones comprendidas entre 1.0 y
2.0 microgramos por ml de solución de hidróxido de sodio 0.1 N.
Valor normal en sangre
Hasta
15 microgramos por ciento.
Interpretación de los resultados.
El ion cianuro es muy
tóxico. En las intoxicaciones por inhalación de gas cianhídrico pueden
registrarse valores de 100 ug o más por 100 ml de sangre. Por ingestión de
dosis elevadas (200 mg pueden provocar la muerte de un sujeto adulto), la
concentración en sangre supera el orden de 1 a 2 mg por cada 100 ml
Venenos volátiles. Destilación en medio
acuoso-ácido
El material a
analizar, mecánicamente dividido se coloca en un balón de destilación de
capacidad adecuada con agua destilada, hasta obtener una papilla fluida,
acidificada luego por agregado de solución al 10 % de ácido tartárico. En el
recipiente colector se coloca un volumen adecuado de agua destilada, que a su
vez puede ser refrigerada exteriormente con hielo. La acidez tártrica confiere
al contenido del balón un pH adecuado y evita alteraciones eventuales de
ciertos complejos. La destilación, sea directa o por arrastre con vapor de
agua, se prosigue hasta recoger 50 a 75 ml de destilado, con esta fracción se
procede a realizar una serie de ensayos
genéricos que puede sugerir o excluir la
existencia de determinados tóxicos volátiles.
1.- Aspecto. Corrientemente el destilado debe ser
límpido, ocasionalmente turbio blanquecino con separación de ácidos grasos de
bajo PM, que se destacan en la capa superior del líquido. En ocasiones la
turbidez es debida a la existencia de vehículos orgánicos no miscibles con
agua, benceno, solventes varios.
2.-Olor. Permite presumir la existencia de
determinados compuestos siempre que pueda prevalecer sobre el olor propio que
acusan los destilados, habitualmente el olor nauseabundo del material visceral deteriorado puede
enmascarar la percepción de otros
compuestos de trascendencia toxicológica.
3.- Reacción. En estas condiciones es ácido
(acético, propiónico). Normalmente el pH debe ser ácido por la generación del
CO2, el pH se determina con papeles indicadores o utilizando soluciones de
indicadores químicos variados. De todos modos la reacción ácida para ser
importante debe estar acompañada de lesiones coincidentes en el material
remitido (por ej. estómago). Debe notarse que en intoxicaciones mortales con
ácidos clorhídrico (Muriático) o Sulfúrico, no suele determinarse la presencia
de los ácidos al estado libre, pues los mismos son neutralizados por la bases
de los tejidos destruidos por la acción caústica, allí lo que notaremos es el
marcado aumento de los aniones cloruro o sulfato.
4.- Carácter reductor. En tubo de ensayo se colocan 5 ml
del destilado y II gotas de sol. de cromato de potasio al 5 %, mezclar y
agregar por las paredes del tubo II gotas de ácido sulfúrico puro, procurando
que los líquidos no se mezclen. En la zona límite aparecerá, un anillo verde o
azul, si existe material reductor. Entre los compuestos de interés toxicológico
que dan este ensayo positivo debemos citar: metanol, etanol, formol, etanal,
acetona, etc. Tengamos en cuenta que este ensayo puede dar positivo por la
formación de productos reductores cuando el material está muy deteriorado por
la putresfacción. Por lo tanto debe asignarse más importancia con este ensayo a
un resultado negativo.
5.- Acción sobre el ión diamino-plata. Se basa en la propiedad oxidante del ion plata, y en su capacidad de
orignar combinaciones insolubles con ciertos compuestos volátiles de
importancia toxicológica. A 5 ml de sol. de nitrato de plata al 5 %, colocados
en tubo de ensayo limpio, agregar gota a gota c.s. de amoniaco puro hasta
disolución exacta del precipitado de oxido de plata. Incorporar 5 ml del
destilado, mezclar bien y dejar en reposo durante unos minutos. Puede
observarse una reducción parcial (color castaño de intensidad variable):
calentar a b.m. hirviente durante unos minutos y enfriar, la aparición de un
ppdo negro o castaño oscuro que generalmente sobrenada es imputable a
compuestos sulfurados, sin proyección médico legal. En presencia de formol,
acetaldehído, cloroformo, fenol, hidrato de cloral, originan espejo metálico
sobre la pared del fondo del tubo.
6.- Ensayo de Lieben.
A 5 ml del destilado agregar 1 ml. de hidróxido de sodio al 10 % y gota a gota
c.s. del reactivo de Lieben hasta color amarillo neto. En presencia de etanol,
etanal o acetona, aparecerá en frio un ppdo. amorfo de color amarillo, el que
por calentamiento a b.m. y posterior enfriamiento genera un ppdo. amarillo
cristalino y un olor característico a iodoformo. El reactivo de Lieben origina
iodoformo con todo compuesto que contenga la agrupación CH3-CO-. Si se repite
el ensayo pero alcalinizando con NH3 en lugar de HONa, solo la acetona produce
el iodoformo por lo tanto esta variante constituye un ensayo diferencial. El Rvo
de Lieben es una solución de I2 y IK en agua destilada.
7.- Ensayo de Fujiwara. En tubo de ensayo limpio colocar 2 ml del
destilado e igual volúmen de solución de hidróxido de sodio al 30 %, mezclar e
incorporar 2-3 ml de piridina pura, agitar y calentar a BM, aparecerá una
coloración rosada a roja en la capa piridinica, la piridina debe ser pura y
probarse mediante un ensayo en blanco. El ensayo positivo implica la existencia
de derivados organoclorados como el cloroformo, el tetracloruro de carbono, tricloroetileno,
dicloroetileno, hidrato de cloral, etc.
8.- Ensayo con HONa al 30 %. A 5ml del destilado, agregar igual volumen
de sol. de HONa 30 % y calentar a BM hirviente durante 5 minutos, en presencia
de nitroderivados aparecerá una coloración amarilla de intensidad variable.
Este ensayo es util para detectar al p-nitrofenol producto de la hidrólisis de
un plaguicida organofosforado como el parathion.
9.- Formaldehído (Formol) La presencia del formol, puede ser
producto del agregado del mismo como conservador, por cierto que por error, ya
hemos afirmado que el único conservador que debe utilizarse es la
refrigeración. Este produce un aspecto y consistencia típicos al material
visceral cuando se agregó con esa finalidad. Pequeñas cantidad del mismo que
podrín proceder de una intoxicación pueden detectarse mediante el reactivo de
ácido cromotrópico en sol. concentrada de ácido sulfúrico, agregar al mismo
luego de agitar vigorosamente II ó III gotas del destilado y calentar a b.m.
hirviente, en presencia de formol se generará una coloración borra vino, rojo
violeta o violeta
10.- Alcohol metílico. Su
identificación se realiza previa transformación en formol. A 5 ml del destilado
se agregan unas gotas de sol. acuosa fosfórica de permanganato de potasio, dejando
en reposo, 5 a 10 minutos, por agregado de sulfito de sodio sólido reducir el
exceso de permanganato. Sobre la solución límpida se efectúa el ensayo
descripto en el punto anterior.
Determinación de alcohol etílico.
Método por microdifusión de
Feldstein y Klendshoj
Muestras: Pueden utilizarse sangre,
orina, homogenato de tejido (cerebro –
hígado) contenido gástrico.
Condiciones de recolección.
En caso de sangre. No
debe utilizarse como antiséptico local alcohol u otras soluciones de sustancias
reductoras, ya que interfieren en la determinación. Se aconseja usar solución
jabonosa o solución acuosa de bicloruro de mercurio al 0.5 %
Condiciones de conservación de la
muestra.
Colocar la muestra en recipientes de plástico
con tapa hermética (no usar tapones de goma), conteniendo 2 a 5 mg de fluoruro
de sodio (anticoagulante y conservador de preferencia) o citrato de sodio u
oxalato de sodio.
Drogas: Todas deben ser de calidad analítica (p.)
Dicromato
de potasio.
Carbonato
de potasio.
Yoduro
de potasio.
Tiosulfato
de sodio
Almidón.
Acido
sulfúrico concentrado.
Materiales:
Unidad
para micro difusión de Conway con su respectiva tapa
Microbureta
de 2 ml
Baño
de hielo
Material
de vidrio convencional de laboratorio.
Reactivos:
Solución bicromatada ácida.
En un recipiente
adecuado colocado en un baño de hielo, agregar 600 ml de agua destilada. Con
cuidado y agitando agregar 133 ml de
ácido sulfúrico
concentrado.
Una vez frío, agregar 19.6 g
de Cromato de Potasio y completar a 1
litro en matraz aforado con agua destilada.
Solución saturada de carbonado de
potasio. Usar carbonato de potasio pa.
Solución de yoduro de potasio 3 N.
Solución de tiosulfato de sodio 0.1
N. Debe conocerse su título exactamente.
Solución de almidón
soluble al 1 %. Esta solución debe llevarse a
ebullición en el momento de prepararla y
se conserva en heladera durante cierto tiempo. Agregar como conservador 5 mg de yoduro mercúrico por
gramo de almidón.
Lubricante: Parafina y vaselina sólida mezcladas en proporción de acuerdo a la
temperatura.
Procedimiento:
Se colocan en el
compartimento interno de la cámara de Conway 1,0 ml de la solución de dicromato de potasio
sulfúrica. En un extremo del compartimento externo se coloca 1.0 ml de sangre u orina; en el otro extremo
de la cámara se agrega 1.0 ml del
reactivo liberador (solución saturada de carbonato de potasio). Tapar la cámara
y hacer girar la misma suavemente sobre la mesa de trabajo. Dejar la cámara 30
minutos a 56 oC
Efectuar paralelamente
un blanco con agua destilada. Se deja difundir 10 hs a 25ºC, 6 horas
a 37 oC ó 2 hs. a 50 oC. Una vez cumplido el tiempo de
difusión, se destapa la cámara y se procede a efectuar la micro titulación,
directamente en el compartimento interno.
Para ello se agrega
0.5 ml de la solución de yoduro de potasio 3 N, se agita con varilla y se
comienza a titular rápidamente al principio, y más lentamente luego, con la
solución valorado de tiosulfato de sodio 0.1 N colocada en la micro cubeta.
Cuando se observa la aparición fugaz del color celeste-verdoso del cromo III,
se adiciona una gota de la solución de almidón, y se continúa ahora gota a gota
la titulación, hasta desaparición del color azul del yodo.
Se titula el blanco de
igual manera, anotando los volúmenes de tiosulfato gastados en cada uno de los
casos.
Ecuaciones y cálculos:
2 Cr207= + 16 H+ + 3
CH3CH2OH ------- 4 Cr+3
+ 11 H2O + 3 CH3COOH
CH3CH2OH --------- CH3COOH
+ 4 e-
Cr2O7= + 14 H+ + 6 e- ---- 2
Cr3+ + 7 H2O
El PE del alcohol
etílico en función de la ecuación Redox debe ser el PM/4, luego 46.06/4= 11.51
Número de equivalentes = V.N
Normalidad del S2O4Na2
usado = 0,1 N
Nro. de equivalentes en la muestra = Nro. de EQ
de dicromato en el blanco – Nro. de EQ de dicromato en exceso.
1 EQ de dicromato ------
1 EQ de etanol = 11.51
1 EQ
etanol ------- 11.51 g
0,1 (VB – VM)------ x gramos de etanol presente en VS
Donde VB = ml de tiosulfato gastados
en el blanco.
VM = ml de tiosulfato
gastados en la muestra
VS = ml de sangre u orina
colocados en la cámara para el ensayo.
X
= 0,1 (VB – VM).
11,51
Por lo tanto la concentración de etanol presente en la
muestra será
Etanol
(g/l) = N x (VB – VM) x 11.51 donde N es la normalidad del tiosulfato.
Vs
Interferencias:
En este método
interfieren las siguientes sustancias: acetaldehido, alcohol metilico, alcohol isopropilico, propanaldehido, alcohol
amílico, octanol y éter etílico. No interfieren acetona, cloroformo, benceno,
tetracloruro de carbono, tricloroetileno, etc.
Método de Kozelka y Hine
Es un método
oximétrico que presenta la ventaja de excluir varias de las posibles
interferencias que se observan en la microdifusión de Feldstein.
Muestras: Sangre u orina.
Drogas: Todas deben ser de calidad analítica.
Wolframato
de sodio.
Hidróxido
de sodio.
Cloruro
mercúrico.
Dicromato
de potasio.
Reactivos:
Solución
acuosa de wolframato de sodio al 10 %
Solución
de ácido sulfúrico 1 N
Solución
acuosa saturada de hidróxido de sodio
Solución
acuosa de cloruro mercúrico.
Solución
de bicromato de potasio 0.1 N
Acido
sulfúrico concentrado pa.
Yoduro
de potasio pa.
Solución
de tiosulfato de sodio 0.1 N
Solución
de almidón soluble al 1 %
Materiales y equipamiento
Dispositivo
de Kozelka – Hine.
Baño
de María.
Procedimiento:
En el tubo A de la figura se coloca
1.0 ml de sangre y 5 ml de la solución de wolframato de sodio al 10 %. Se
mezcla y se agrega gota a gota agitando 5 ml de la solución de ácido sulfúrico
1 N.
En el tubo B se colocan 10 ml de la
solución saturada de hidróxido de sodio y 10 ml de la solución de cloruro
mercúrico.
Se adaptan los tubos y
se coloca agua en el erlenmeyer colector. Se destila por arrastre de vapor de
agua hasta recoger 25 – 30 ml. El vaso que contiene los tubos A y B deben
calentarse a 90 – 100 oC para evitar condensaciones.
Al destilado se
agregan 10 ml exactamente medidos de la solución de bicromato de potasio 0.1 N
y 5 ml de ácido sulfúrico pa. por las paredes de manera de obtener 2 capas.
Cerrar el erlenmeyer con la tapa y mezclar con cuidado.
Se calienta a BM hirviente
20 minutos. Se enfría y se diluye hasta alrededor de 50 ml.
Se adiciona 0.2 g de
yoduro de potasio pa. y se mezcla hasta disolución total.
Se titula con solución de tiosulfato de sodio
0.1 N, hasta casi decoloración, se adiciona II gotas de la solución de almidón
y se continúa la titulación hasta el punto final (viraje del color azul –
violeta al verde).
Ecuaciones y cálculos:
(Vd.Nd) – (Vt.Nt) x 11.51 = mg
Etanol / ml de sangre
Vs
Vd =
Volumen de la solución de bicromato de potasio.
Nd =
Normalidad de la solución de bicromato de potasio.
Vt =
Volumen gastado de la solución de tiosulfato de sodio.
Nt = Normalidad de la solución de
tiosulfato de sodio.
Vs =
Volumen de sangre u orina utilizado
Determinación cuantitativa de alcohol etílico por C.F.G.
Extraer por punción
venosa, 10 ml de sangre, acondicionándola sobre heparina como anticoagulante.
La punción debe hacerse desinfectando la zona con una sustancia adecuada
carente de alcohol etílico. Por ej. una solución de yodo que no contenga
alcohol o una solución conteniendo cloruro de mercurio.
La muestra hasta su
peritación debe reservarse a 4oC, hasta el envío al laboratorio en
la misma jeringa en que fue extraída con su respectivo capuchón de aguja y
rotulada debidamente.
Si la muestra es de
orina, se acondiciona en frasco de plástico limpio, bien cerrado e identificado
en forma refrigerada a 4oC.
Técnica
Viales
|
Nro. 1
|
Nro.2
|
Nro.3
|
Nro.4
|
Muestra
|
Sol.
testigo de etanol
|
0,1 g/l 1ml
|
1 g/l 1 ml
|
2 g/l 1 ml
|
3 g/l 1ml
|
-----------
|
Sol.
de standard interno
|
1 ml
|
1 ml
|
1 ml
|
1 ml
|
1 ml
|
Sol. sat. de C03K2
|
1 ml
|
1 ml
|
1 ml
|
1 ml
|
1 ml
|
Muestra, sangre u orina
|
---------
|
---------
|
----------
|
--------
|
1 ml
|
Procedimiento
En viales de vidrio de
5 ml de capacidad se agrega a cada uno, 1 ml del standard interno, (solución de
alcohol n-propílico 1,5 g/l), a continuación 1 ml de las soluciones testigos de
etanol, de las diversas concentraciones propuestas, y al tubo de la muestra 1
ml de la sangre u orina en estudio y finalmente 1 ml de la solución liberante
(sol.sat. de CO3K2). Se cierra con tapón de material que no liberen sustancias
que interfieran luego en el análisis y finalmente se le coloca un precinto de
aluminio. Agitar con rotación suave e incubar a 40oC en estufa
durante 1 hora. Luego se deja estabilizar a temperatura ambiente y se inyecta
un volumen de la fase gaseosa en equilibrio con el líquido de cada uno de los
viales, en el Cromatógrafo Gaseoso, con columna capilar, 1700C de temperatura en el horno,
inyector a 220oC, detector
FID a 240oC. Integrador Merck-Hitachi D-2500ª.
Cálculos.
En el trazado
producido por el registrador se verifica el tiempo de retención para confirmar
la identidad del volátil detectado, por comparación con los testigos de alcohol
etílico, lo que nos permitiría detectar la presencia de otras sustancias
volátiles que por poseer poder reductor podrían causar interferencias.
Relacionando la altura
de los picos de alcohol etílico y propílico en cada uno de los testigos y las
concentraciones de los testigos respectivos,
se obtiene un factor, que
permitirá calcular multiplicando la relación de esos picos en cada una de las
muestras analizadas, la concentración de alcohol etílico en g/l en cada una de ellas.
Método enzimático para la determinación de alcohol etílico en líquidos
biológicos
Existen equipos comerciales para efectuar esta determinación los cuales
son utilizados en Europa y USA, en nuestro país pueden tener aplicación pero el
inconveniente es el elevado costo. Es una técnica accesible para cualquier laboratorio
aún de pequeña complejidad, tiene alta sensibilidad y absoluta especificidad,
permitiendo la realización en tandas de muestras situación habitual en los
laboratorios forenses, como equipamiento solo requieren un espectrofotómetro
visible con alcance hasta 340 nm en el UV, cosa que es común en los aparatos
visibles de buena calidad.
La
determinación se basa en la acción enzimática que realiza la
alcoholdeshidrogenasa sobre alcohol etílico tranformándolo por la sustracción
de H en aldehído etílico, la acción de la enzima es absolutamente específica y
solo actúa sobre el etanol, el cual en este caso es el “sustrato”.
Los
atomos de H secuestrados por la enzima son cedidos a un nucleotido denominado
adenosin di nucleotido (NAD), el cual se transforma en adenosin di nucleótido
reducido (NADH), la Absorbancia del NADH es a 366 mu en el UV y la
concentración de NADH que se forme será proporcional a la concentración de
alcohol etílico en el material analizado.
Etanol + ADH ---------- Etanal + ADH reducida
ADH
reducida + NAD -------- NADH + ADH
Trabajando
con una curva de calibración elaborada con las absorbancias de soluciones
testigo de conc. conocida, se interpola en la misma el valor de Absorbancia
obtenido con las muestras, obteniendo de esta manera los valores de
concentración.
Determinación de alcohol metilico en
sangre
Muestras:
Sangre:
No usar etanol como
antiséptico, se recomienda el uso de cloruro mercúrico al 0.5 %. Extraer sangre
usando como anticoagulante fluoruro de sodio al 1 % y trasvasar a un tubo de
plástico provisto de tapa a rosca, llenar totalmente el tubo.
Conservar en la heladera entre 0 y 4º C
En caso de no contar con
fluoruro de sodio, usar citrato u oxalato. No usar EDTA ni heparina como
anticoagulante.
Líquido cefaloraquídeo u orina.
Recoger la orina sobre
fluoruro de sodio al 1 % en recipientes con características similares a las
descriptas anteriormente. Conservar en heladera entre 0 y 4oC.
Fundamento del método:
El alcohol metilico es
aislado por microdifusión y posteriormente oxidado a formaldehído, el cual es
cuantificado por reacción con el ácido cromotrópico. El complejo obtenido (de
color violeta) se lee a 580 nm.
Materiales:
Unidad
de Conway Nro. 1
Material
de vidrio convencional de uso en laboratorio.
Drogas:
Acido
sulfúrico pa.
Carbonato
de potasio pa.
Permanganato
de potasio pa.
Bisulfito
de sodio pa.
Acido
cromotrópico pa.
Alcohol
metilico pa.
Reactivos:
Solución
acuosa de ácido sulfúrico al 10 % (V/V)
Solución
acuosa saturada de carbonato de potasio.
Solución
de permanganato de potasio al 5 %
Solución
acuosa saturada de Bisulfito de sodio (de preparación extemporánea)
Solución acuosa de ácido cromotrópico al 0.5 % (de preparación
extemporánea)
Solución madre de
alcohol metilico; diluir 1.0 ml de metanol absoluto con cantidad con cantidad
suficiente de agua destilada para 1000 ml
Soluciones testigo de
alcohol metilico:
Diluir 2.0, 4.0, 6.0,
8.0 y 10.0 ml de la solución madre con cantidad suficiente de agua destilada para 10.0 ml y llevar a 100.0 ml
con solución acuosa de ácido sulfúrico
al 10 % (Las mismas equivalen a 1,58; 3,16; 4,74; 6,32 y 7,9 mg de metanol/100 ml).
Vaselina-parafina en
la proporción apta para ser utilizada según la temperatura.
Instrumental:
Espectrofotómetro de buena
resolución (1 nm)
Cubeta de caras planas, paralelas,
de sección cuadrada, de 1 cm de paso de luz.
Técnica:
Microdifusión
Colocar en el
compartimento interno de la cámara de Conway, 2,2 ml de solución acuosa de ácido
sulfúrico al 10 % (V/V)
Agregar en uno de los
extremos del compartimento externo de la cámara, 1 ml de la solución saturada
de carbonato de potasio. Tapar parcialmente la misma.
Seguidamente, en el
otro extremo del mismo compartimento, colocar 1 ml de la muestra, cuidando de
que no entre en contacto con la solución liberadora. Cerrar la cámara.
La reacción se inicia
desplazando la cámara en forma circular sobre el plano de la mesa de trabajo.
Dejar difundir 2 hs. a temperatura
ambiente.
Reacción de color
Una vez finalizada la
micro difusión preparar distintas diluciones del contenido del compartimento
interno, (1/2, 1/10, 1/40). Las mismas se realizan en solución de sulfúrico al
10 % (V/V)
Paralelamente se procesa un blanco
de reactivos y un blanco de muestra.
Proseguir de la siguiente manera, en
tubos de ensayo.
|
Muestra
|
Blanco muestra
|
Blanco reactivos.
|
Alícuota
del compartimento interno o dilución corresp.
|
1 ml
|
1 ml
|
--------
|
H2SO4
10 % (V/V)
|
-------
|
-------
|
1 ml
|
KmnO4
5 % (gotas)
|
I
|
-------
|
I
|
Dejar en reposo 10 minutos.
|
|||
Bisulfito
de Sodio (una pizca sólida o una gota de solución saturada)
|
I
|
I
|
I
|
Acido
cromotrópico 0.5 %
|
0,2 ml
|
0,2 ml
|
0,2 ml
|
Colocar en baño de hielo
|
|||
Acido
sulfúrico conc.
|
4 ml
|
4 ml
|
4 ml
|
Colocar en baño María
hirviente 15 minutos.
|
Enfriar y diluir a 10
ml con agua destilada.
Leer en
espectrofotómetro a 580 nm contra ácido sulfúrico concentrado.
El valor de
absorbancia obtenido se interpola en una curva de calibración preparada con las
soluciones testigos de MeOH a partir de una solución madre de metanol previa
sustracción del valor de absorbancia del blanco de muestra.
Cálculos
Metanol (g/l) = X ug. 1.21. 2.2. 0.001. dilución
Donde X = microgramos de metanol obtenidos de
la curva de calibración.
1.21 = factor de corrección que se debe usar
porque la tensión del metanol no es reducida a cero en el fluido absorbente y
el equilibrio de difusión de aproximadamente el 82.5 % de absorción es
alcanzado.
2.2 = volumen de reactivo fijador.
0.01
= factor de conversión de las unidades.
Interferencias
La especificidad de la
reacción entre el formaldehído y el ácido cromotrópico está indicada por el
hecho de que los alcoholes, cetonas y los siguientes aldehídos NO reaccionan para dar compuestos
coloreados:
acetaldehido – Propionaldehído – Butiraldehído
– Isobutiraldehido – Isovaleraldehído – cloral – Glioxal – benzaldehido –
Ftalaldeído – El Gliceraldehído de color amarillo
Los cuerpos cetónicos
presentes en la muestra interfieren en la determinación, arrojando resultados
falsos positivos. La existencia de formaldehído en alta proporción hace que el
método sea inaplicable para metanol.
Es importante tener en
cuenta que una concentración superior a 0.8 g/l de metanol es de severo riesgo
de muerte para el paciente.
Investigación de tóxicos metálicos
Destrucción de materia
orgánica (DMO)
En la mayor parte de los envenenamientos
producidos por las “sustancias metálicas”, (metales y no metales), el perito
químico antes de proceder a la separación de estas, que se encuentran
combinadas a albúminas, formando albuminatos, difíciles de caracterizar por los
métodos ordinarios del análisis mineral, debe efectuar previamente la
desintegración de la materia orgánica. La investigación y valoración de los
iones metálicos de importancia toxicológica se realiza previa Mineralización de
la materia orgánica.
Todo procedimiento de mineralización impone la
división mecánica del material sólido a fin de favorecer el proceso oxidativo
que supone la destrucción de materia orgánica, que se verifica así en forma homogénea,
rápida y no tumultuosa, pero si la cantidad de materia resultara reducida o por
aconsejarlo la respectiva técnica, puede
emplearse tal cual, controlando la
intensidad del “ataque oxidante” en sus primeras etapas, al solo efecto de prevenir pérdidas por
arrastre mecánico.
La mineralización o DMO puede efectuarse de dos
maneras: via seca, calcinación y actualmente mediante la utilización de un
dispositivo de microondas de gran potencia,
o por vía humeda: cloro naciente o solución sulfonítrica-perclórica.
a)Método por
calcinación (Vía seca)
Consiste en someter la materia orgánica a la
incineración, tiene como ventaja su rapidez, sin embargo en toxicología tiene
poca aplicación, porque en la investigación de Hg, As y Sb, estos se
volatilizan completamente. Se usan cápsulas de Pt o SiO2, pueden agregarse
algunas sustancias como OMg, cal, nitratos alcalinos.
Técnica de
Strsyzowski.
Indicada para la mineralización en serie,
especialmente para As y eventualmente Sb. En cápsula de cuarzo colocar una
cantidad determinada del órgano o papilla de vísceras o de otro material
orgánico adecuadamente disgregado y agregar luego mezclando bien una solución
acuosa saturada de (NO3)2Mg, agregar luego OMg puro y mezclar íntimamente,
desecar inicialmente en baño de agua y luego sobre tela metálica y un mechero hasta comienzo de carbonización. Se
prosigue el calentamiento con cuidado pues pueden suceder proyecciones
mecánicas del contenido. Finalmente se obtienen unas cenizas blancas o grises,
las cuales se procesan disolviendo en solución acuosa de SO4H2 al 10 % o con
solución acuosa de ClH.
b)Mineralización con digestor a microondas.
Tradicionalmente la
“mineralización”, también denominada
“destrucción de materia orgánica” se efectuó mediante el ataque de las muestras
con reactivos cáusticos y oxidantes. Así conocemos la Destrucción de Materia
Orgánica con Acidos Sulfúrico y ácido
nítrico concentrados o también con la utilización de ácido perclórico. Asimismo
por vía seca se efectuaban mineralizaciones con Nitrato de Potasio y Nitrato de
Amonio en seco. Todos estros procedimientos son
laboriosos, largos, también con ciertos riesgos ante errores del
operador y que exigen disponer de instalaciones apropiadas para la eliminación
de los gases que se generan.
Actualmente se ha propuesto esta
operación, mediante la aplicación de
modernas técnicas instrumentales, que
consisten en efectuar el ataque físico-químico, mediante la utilización de
energía radiante (microondas) y pequeñas cantidades de reactivos cáusticos
oxidantes. . Estas técnicas se ven favorecidas actualmente por disponibilidad
de técnicas suficientemente sensibles de detección, lo que exige que la necesidad de muestra a tratar es
notablemente escasa y por ende facilita el tratamiento.
Técnica
“Destrucción de materia orgánica con
calor, ácido nítrico, ácido sulfúrico y agua oxigenada”
·
Muestra requerida 1 gramo de homogenato o 1 ml del líquido biológico
·
Pretratamiento: 24 hs. con 4,5 ml de ácido nítrico concentrado y III
gotas de ácido sulfúrico concentrado.
·
Luego, se agregan, 16 ml de ácido
nítrico concentrado y 4 ml de agua oxigenada
·
Colocar en el digestor de microondas prefijando el tiempo y temperatura
de trabajo. Por ej. 200 oC
durante 40 minutos.
·
Evaporación del ácido remanente.
·
Lavado con 30 ml de agua, dos veces consecutivas, evaporando finalmente
el agua
·
Concentrar a 1 ml el líquido resultante.
·
Realizar la detección y cuantificación mediante Espectrofotometría de
Absorción Atómica.
c) Mineralización por vía húmeda (sulfo – nitro –
perclórica)
En un balón Kjedhal, se coloca la papilla de víscera y
se agrega ácido nítrico puro. El balón se coloca en BM hirviente hasta
disolución total del material sólido, cosa que se verifica con abundante
desprendimiento de vapores nitrosos de intenso color leonado. Si no existe
urgencia, suele dejarse el material en contacto con el oxidante varias horas.
Desapareciendo todo resto sólido en el ataque nítrico, mezclar e incorporar en
pequeñas fracciones ácido sulfúrico puro, y una vez atenuado el desprendimiento
de vapores nitrosos continuar el calentamiento a BM por más tiempo. Todas estas
operaciones deben efectuarse bajo campana con efectiva aspiración para evitar
los efectos nocivos de los gases que se producen.
A medida que
el ácido nítrico se va consumiendo disminuye el desprendimiento de vapores
nitrosos y comienza entonces el efecto deshidratante y oxidativo del ácido
sulfúrico que se traduce en la liberación de vapores blancos de dióxido de
azufre comenzando la carbonización del material. Esta situación debe evitarse
pues puede generar reacciones no deseadas en el material e incluso puede
ocasionar violentas explosiones. Por lo tanto debe suspenderse el calentamiento
y reintegrar de inmediato las condiciones iniciales, reponiendo el ácido nítrico,
cuando se haya enfriado el material.
Esta operación puede complementarse mediante el
agregado de una mezcla de NO3H y ClO4H controlando el calentamiento. El
agregado del perclórico debe realizarse en las primeras etapas ya que la
liberación de agua del material y el ácido nítrico proveen el grado de dilución
conveniente evitando toda posibilidad de explosión.
Teóricamente la mineralización queda satisfecha cuando
ha desaparecido todo resto orgánico, prácticamente el tratamiento térmico debe
proseguirse hasta eliminar todo exceso de oxidante, por lo cual se calienta
intensamente sobre llama hasta liberación franca de humos blancos.
En este procedimiento el ácido sulfúrico actúa como “fijador” de cationes y como vehículo
de elementos que integran aniones. En presencia de agua actúa como agente
hidrolítico, originando compuestos más simples que resultan fácilmente
afectados por los oxidantes, además hace visible la falta de oxidantes, por
carbonización y liberación de vapores blancos de dióxido de azufre. Por el
efecto hidrolítico que produce favorece la acción oxidante del ácido nítrico y
el ácido perclórico sobre hidratos de carbono y prótidos.
El ácido
perclórico, cuyo poder oxidante es conocido, pero no interpretado en
reacciones de tipo Redox comunes, por tratarse de una mezcla de varios
compuestos, según Kahane, supone que produce un clivage de las moléculas
orgánicas reduciéndolas a moléculas más simples, sensibles al ácido nítrico.
El ácido
nítrico es un oxidante activo, puede utilizarse solo con el ácido
sulfúrico, mientras que el perclórico necesita siempre la presencia del
nítrico.
Ensayo de Reinch
Ciertos elementos metálicos
y no metálicos en variada combinación y en cantidades mínimas, como el
mercurio, arsénico, bismuto, antimonio, etc., son rápida y fácilmente revelados
en materiales diversos (vómitos, alimentos, orina, bebidas, polvos, papilla de
vísceras, etc.) mediante este ensayo, basado en el intercambio de la carga-ion
de acuerdo a la serie de tensiones (electrodeposición). Los elementos
mencionados se depositan sobre una lámina de cobre, utilizada como metal
colector, en forma neutra el mercurio y el bismuto o en combinación cúprica el
arsénico y el antimonio, (arseniuro de cobre),
siendo a posteriori identificados mediante la utilización de ensayos
sensibles y específicos.
Técnica.
Una fracción homogénea de papilla de vísceras
convenientemente dividida, se suspende en c.s. de ácido clorhídrico al 10 %, en
un Erlenmeyer de 250 ml de capacidad, incorporándose a continuación una laminilla
de cobre electrolítico de aproximadamente 1 cm2 de superficie, que previamente
ha sido tratada con ácido clorhídrico puro y caliente para eliminar todo resto
de óxidos e impurezas. Se calienta sobre tela o BM hirviente durante 30 a 45
minutos, efectuando observaciones periódicas a fin de registrar modificaciones
en la laminilla. Si se reduce el volumen de líquido reponer la solución
necesaria. Si se observase la aparición de un depósito sobre la laminilla,
separarla, lavarla a fin de eliminar materiales adheridos y reservarla para los
ensayos identificatorios correspondientes. Sobre la papilla colocar otra
laminilla de Cu de manera de proceder al “agotamiento” del mismo.
Identificación del depósito.
En la actualidad, solo el mercurio y
el arsénico, tienen interés toxicológico y es por ello se les da prevalencia
aun cuando debe tenerse en cuenta la remota posibilidad del antimonio y
bismuto.
Para el mercurio, que generalmente aparecerá como un depósito grisáceo, se
intenta identificarlo mediante la reacción del yoduro cuproso (ICu). Para ello
se coloca la porción de laminilla reservada para este ensayo en un tubo de
ensayo seco, en la boca del mismo se coloca una tira de papel de filtro
impregnada con I gota de solución acuosa de IK y sulfito de sido, y I gota de
solución de sulfato de cobre en sol. ClH 0.1N.
Al
mezclar ambos reactivos se genera Icu. A
continuación se caliente suavemente el fondo del tubo, para volatilizar el
depósito. El vapor de mercurio genera sobre el papel reactivo una coloración
salmón o rojo salmón por formación de (I4Hg)Cu2.
Este simple ensayo nos permite
apreciar la presencia del Mercurio, por lo tanto de ser necesaria la
cuantificación tomaremos los recaudos necesarios en su mineralización para no
perder material durante la mineralización o DMO.
Para identificar el arsénico, utilizaremos el ensayo de Gutzei. En un Erlenmeyer se colocan 25
ml de agua destilada, 10 –12 ml de ácido clorhídrico puro, luego 0.5 a 1 ml de
solución de cloruro estanoso (SnII), mezclar, agregar luego 10 granallas de Zn
y colocar como tapón una columna rellena de un algodón impregnado con solución
acuosa de Acetato de Plomo, la abertura superior de la columna se cubre con un
papel de filtro sobre el que se colocan cristales de Nitrato de Plata los cuales
deben ser blancos o incoloros. Otra posibilidad es colocar un papel impregnado
en Bromuro mercúrico. El viraje de los cristales de Nitrato de Plata al
amarillo que se van intensificando con el tiempo, o de los cristales de bromuro
mercúrico a amarillo, que se va intensificando a naranja o castaño con el tiempo indica la
presencia de As.
La interpretación de lo anterior es
la siguiente: por acción del ácido clorhídrico sobre las granallas de Zn se
produce liberación de hidrógeno, el cual actuará sobre el arseniuro de cobre en
el medio fuertemente reductor que provoca el cloruro de Sn (II), generándose
Arsina, (AsH3) que es un gas y por lo
tanto ascenderá por la columna del dispositivo, esa arsina al reaccionar con el
Nitrato de Plata o bromuro de mercurio generará los productos mencionados.
El algodón impregnado con acetato de
plomo tiene la finalidad de retener el eventual SH2 que pueda liberarse, que
reaccionará con el Pb++, formándose SPb de color negro.
Reacciones
químicas:
As03H2- + 6 Cuo + 8 H+ ---------
As2Cu3 + 6 H20 + 3 Cu++
As2O3 + 6 H+ + 6 Cuo ----------- As2Cu3 + 3 H20 + 3 Cu++
As2Cu3 + 6 H+ ------------ 2 AsH3
+ 3 Cu++
2 H+
+ Zno ------------ Zn++ + H2
AsH3 + 6 NO3Ag
------------ AsAg3.3NO3Ag + 3
NO3H
amarillo
AsH3 + Br2Hg
------------- H2As.Hg.Br +
BrH (amarillo)
H2As.Hg.Br +
Br2Hg -----------
HAs.(Hg.Br)2 + BrH
(amar. Naranja)
HAs.(Hg.Br)2 + Br2Hg ----------- As(Hg.Br)3 +
BrH (naranja)
As(Hg.Br)3 + AsH3
----------- As2Hg3 + 3
BrH (castaño)
Si los ensayos para Mercurio y
Arsénico dieran negativos, se deberá investigar la eventual presencia de
bismuto y antimonio. Para bismuto, se trata la laminilla de cobre con una
solución de NO3H al 20 %, dejando varios minutos en contacto, agitando con
frecuencia, luego se diluye con agua y se agrega 1 ml de reactivo iodoquínico,
aparecerá un color naranja en caso positivo. El Reactivo iodoquínico se prepara
con sulfato de quinina, solución acuosa de ácido nítrico y IK.
Para investigar antimonio, se trata la laminilla previamente lavada con agua
destilada con una solución alcalina de MnO4K, de manera de oxidar el eventual
Sbo a Sb+++ , posteriormente se trata con SH2,
obteniéndose el S3Sb2 precipitado de color anaranjado.
Investigación
de tóxicos metálicos por espectrofotometría de absorción atómica.
Actualmente se ha hecho muy común la
investigación de tóxicos metálicos por esta técnica, fundamentalmente cuando el
objetivo es establecer la concentración de los mismos en sangre u orina. Como
ya se ha mencionado son numerosas las intoxicaciones o impregnaciones con
venenos metálicos en la actividad laboral o por la exposición accidental
prolongada a estos elementos y es por ello que se ha propuesto con éxito la
aplicación de la AA a estas determinaciones.
Para evitar la DMO, se ha propuesto
otra variante, que consiste en intentar un complejamiento del metal en un
reactivo orgánico con posterior extracción en un solvente orgánico no miscible.
Esta técnica se ha propuesto para casi todos los metales pesados, destacándose
entre ellos plomo y talio, aunque también se la utilizado par todos los
restantes metales.
Básicamente consiste en tratar la
orina o sangre, con una dilución del complejante, como tal se utilizan
carbamatos, destacándose el pirrolidin carbamato de amonio y el di-tio
carbamato de sodio. Estos carbamatos forman complejos estables con los metales
pesados de manera inespecífica, dicha especificidad puede mejorarse mediante un
ajuste de pH como veremos. Los complejos son fácilmente extraíbles por
solventes orgánicos inmiscibles con agua, con lo cual se consigue
simultáneamente un notable aumento de concentración, pues se utilizan pequeños
volúmenes del solvente orgánico, habitualmente la décima parte del volumen de
muestra, con lo cual incrementamos sustancialmente la concentración. (1/10). La capa orgánica es la que se procesa por
absorción atómica aprovechando la selectividad que otorgará la lámpara de
cátodo hueco y el monocromador el equipo de AA para optimizar la especificidad
de la determinación.
Para tratar de minimizar el efecto
de la matriz sobre el resultado de la absorción atómica de la medición final de
la técnica se utiliza la técnica del standard interno, es decir se agrega una
cantidad conocida del metal de interés a la muestra de manera que el mismo se
vea afectado en la extracción y medición final, de la misma manera que el
analito que investigamos en la muestra, y de ese modo dichas interferencias
serán absolutamente consideradas en los cálculos.
Técnica.
Para
orina, el esquema
básico de la técnica utilizada sería el siguiente:
En dos ampollas de decantación
escrupulosamente lavados y liberados de metales pesados, mediante el lavado
exhaustivo con sol. De ácido nítrico y adecuadamente enjuagadas inmediatamente
antes de su utilización para esta técnica, se colocan 50 ml de orina a analizar
en cada una, esta orina previamente se
ajusta a pH, adecuado según el metal a investigar, para Tl pH 7.0, para Pb 5,5. El ajuste según el pH previo del
material se hace o con ac. Clorhídrico o amoníaco.
A una de las dos ampollas se agregan
0.3ml de una solución del metal a investigar en concentración 50 ug/ml, vale
decir que este se diluirá en los 50 ml de orina, generando una concentración
adicional de 0.3 ug/ml. (Se agregan 15 ug de Tl o Pb, que diluidos en 50 ml de
orina, generan una concentración de 0.3 ug/ml.
A estos
volúmenes de orina, se agregan 2 ml de solución acuosa del complejante al 5 %,
como ya dijimos el “pirrolidín ditiocarbamato” para el Pb y el
“dietilditiocarbamato” para el Tl, se agitan acompasadamente ambas ampollas
durante 15 minutos, de manera de facilitar la formación del complejo.
A continuación se agrega 5ml del solvente extractante, habitualmente metil
isobutil cetona, nuevamente se agitan acompasadamente ambas ampollas durante
otros 15 minutos, de manera de facilitar la extracción del complejo a la capa
orgánica. La agitación tiene que ser a buen ritmo pero no violenta, para evitar
la generación de emulsiones.
Finalmente se deja en reposo ambas
ampollas, observándose la formación de dos fases, la orgánica de menor volumen
se ubica en la parte superior y es la que debe reservarse, luego de su
separación, para la lectura por
absorción atómica con llama.
Los valores de Absorbancia de ambos
extractos, uno denominado “muestra” (M) y el otro denominado “muestra + T” (M+T).
Cálculos:
El cálculo de la concentración del
metal en la orina se hace con la fórmula:
Conc
(ug/ml) = K (0.3 ug/ml)
(1
– K)
En donde K, es el cociente de la
Abs. de M / Abs de (M+T), y el otro término es el de la concentración del metal
agregado.
En realidad esta fórmula se basa en
el hecho de la abs. de cada espécimen debe ser proporcional a la conc. del
analito buscado, es decir la Abs. de M, corresponderá a la concentración del
analito presente en la muestra, la Abs. de M+T, corresponderá a la
concentración del analito presente más la del analito agregado, y puede
demostrarse fácilmente que en la fórmula propuesta se respeta esta hipótesis.
Para sangre, la metodología propuesta es similar a la descripta, por
supuesto que utilizando volúmenes
menores, normalmente 2,5 ml, la prueba se efectúa en tubos de centrífuga
previamente tratadas con ácido nítrico como ya se mencionó.
Luego se agrega algún tensioactivo potente,
para producir total hemólisis, habitualmente Triton X-100 o similar, una vez
hemolizado, a uno de los tubos, se
agrega el estándar interno, del cual deberemos calcular la concentración
resultante, a continuación el complejante, en un volumen adecuado a las
necesidades, se agita 15 minutos, luego se agrega 0.5 ml del extractante MIBC,
a ambos tubos, se agita otros 15 minutos y se deja en reposo para que separen
ambas fases. Finalmente se efectúa la lectura por AA con llama.
Los cálculos se hacen con la fórmula
ya propuesta, teniendo en cuenta el valor de la concentración del analito
agregado en esta ocasión.
Investigación de tóxicos
orgánicos fijos
Como ya se ha
mencionado la investigación de los tóxicos orgánicos fijos se efectúa
aprovechando la mayor solubilidad de éstos en solventes orgánicos que en el
agua, de modo que poniendo en íntimo contacto el material a investigar con un
solvente orgánico y no miscible con el agua, se aprovecha por partición el
traspaso de las sustancias orgánicas de la fase acuosa a la orgánica,
recordemos que el 70 % de la masa del cuerpo humano está constituido por agua,
de modo que cuando buscamos tóxicos de este tipo en orina, sangre, vómitos y aún material
visceral los mismos se encontrarán en fase acuosa.
El tratamiento de la
muestra variará con el tipo de la misma, pero el fundamento será el mismo y
consiste en realizar una apropiada transferencia de las drogas a la fase
orgánica. Los solventes habitualmente utilizados para esta técnica son el Eter
de Petróleo y el Eter etílico, también denominado Eter sulfúrico por su modo de
obtención, en ambos casos se aprovecha su carácter de inmiscibles con el agua y
su bajo punto de ebullición que facilitará su posterior evaporación.
La extracción no es
demasiado selectiva y es por ello que se utiliza una marcha aprovechando
ligeras diferencias en cuanto a la afinidad de algunos de los tóxicos de
interés, realizándose primero una extracción con Eter de Petróleo, denominando
a este extracto “Eter neutro”, a continuación y sobre la misma muestra ya
procesada se realiza un tratamiento con Eter Etílico en medio ácido,
denominando a este segundo extracto “ Eter ácido” y finalmente sobre la misma
muestra se efectúa un tercer extracto ahora en medio alcalino con Eter Etílico,
denominando a este extracto “Eter alcalino”. Como puede verse se efectúan tres
extracciones sucesivas de modo de recuperar tres grupos de tóxicos orgánicos de
interés (Técnica según Fassi, A.M.).
Mediante esta técnica
que detallaremos a continuación podemos separar los siguientes grupos de
tóxicos orgánicos:
“Eter neutro”:
Pesticidas organoclorados y organofosforados.
“Eter ácido”:
Barbitúricos, Hidantoinas, Glutetimidas, Carbamatos, Analgésicos.
“Eter alcalino”: Anfetaminas, benzodiacepinas,
Fenotiacidas, Alcaloides, Anestésicos sintéticos, Analgésicos.
Para aprovechar la
mencionada selección es imprescindible el orden sucesivo propuesto, pues de invertirlo y extraer inicialmente con
el Eter alcalino en el mismo se extraerían los tres grupos desperdiciándose la
posibilidad de seleccionar los tóxicos.
A continuación
detallaremos el procedimiento sobre una muestra de orina, la elección de este
material se debe a su menor complejidad y también a la mayor frecuencia de
realización en el ámbito de los laboratorios de Criminalística.
Se toman 50 ml de
orina y se colocan en una ampolla de decantación limpia, se verifica su pH que
debe ser 6.5 a 7.0. Este se efectúa con un PHmetro o con papel indicador de
pH. Si la orina fuera de varios días o
estuvo mal conservada es probable que su pH sea superior en cuyo caso se debe
regular mediante el agregado de adecuadas cantidades de Ac.ClH.
A continuación se
agregan 5-10 ml de Eter de Petroleo. Recordemos que el mismo es un corte de HC
constituido fundamentalmente por Hexano y Heptano. Se mezcla suavemente por
inversión reiteradamente para colocar ambas fases (acuosa-orgánica) en íntimo
contacto, de modo de evitar una violenta agitación que podría formar emulsiones
no deseadas y que complicarían la posterior operación de la muestra. A
continuación se deja en reposo de modo que ambas fases se separen
espontáneamente por su inmiscibilidad y diferencia de densidad (la capa
orgánica se distribuirá en la capa superior).
Una vez producida la
separación neta, se deja escurrir por el vástago de la ampolla la capa acuosa,
recogiéndola en un vaso de precipitados limpio. La capa orgánica se retira de la
ampolla por el orificio superior colocándola en otro vaso de precipitados
limpio e individualizado “Extracto Eter de Petroleo”.
La fase acuosa se
vuelve a introducir en la ampolla de decantación y sobre la misma se reitera
por dos veces el procedimiento antes mencionado con dos porciones nuevas de 10
ml de Eter de Petroleo. Haciendo el
procedimiento tres veces consecutivas estadísticamente se puede comprobar que
el 97 % de las sustancias a extraer pasarán a la fase orgánica lo que garantiza
la eficiencia del procedimiento. Las capas de solvente orgánico que se generan
en cada extracción se agregarán al recipiente individualizado “Extracto Eter de
Petroleo”
Finalizada esta etapa,
se procede a acidificar con cantidad adecuada de Ac. ClH la alícuota de orina
ya extraída de modo de llevarla a pH 5 – 5.5, lo que se verifica con PHmetro o
papel indicador, una vez logrado tal objeto, se coloca en otra ampolla de
decantación en donde se reitera por tres veces el procedimiento de extracción
en idénticas condiciones a las detalladas y con las mismas precauciones
mencionadas, ahora con tres alicuotas de Eter Etílico, las que luego de
separadas se acondicionan en un recipiente individualizado “Extracto Eter
ácido”.
Finalmente la muestra
extraída se acondiciona en una tercera ampolla de decantación procediendo a
alcalinizar con amoníaco a ph 9.5 – 10, lo que se verifica del mismo modo ya
citado, efectuando a continuación el
procedimiento de extracción por tres veces consecutivas con Eter Etílico. Los
extractos así obtenidos se denominan “Extracto Eter alcalino”.
Los tres extractos obtenidos se
evaporan a sequedad calefaccionando con baño de agua hirviente o en plancha
calefactora, recordemos que los puntos de ebullición de los solventes son bajos
y se debe evitar la presencia de llama por su combustibilidad, así como también
exagerado calentamiento que podría provocar
una ebullición brusca con pérdida de material.
Los residuos sé redisuelven en un
volumen pequeño de alcohol etílico y con el mismo se proceden a sembrar cromatogramas
en placa, una para cada grupo,
para detectar inicialmente si se hallan presentes alguno de los tóxicos ya mencionados. Por supuesto que las mismas
serán orientativas y con idea de rastreo, de encontrarse algún indicio de
tóxico los mismos deben ser verificados y confirmados por otras técnicas, ya
sea cromatografía en placas específicas, cromatografía en fase gaseosa,
líquida, IR, etc.
Las cromatografías de rastreo
utilizan fases móviles diferentes según el grupo de tóxicos investigados.
Para el extracto “Eter de Petroleo,
o Eter neutro” puede utilizarse un solvente constituida por Hexano (40),
Ciclohexano (40), Cl3CH (10), Acetona (10).
Para el extracto “Eter Ácido” puede
utilizarse un solvente constituido por Cl3CH, acetona (80 – 20).
Para el extracto “Eter alcalino”
pueden utilizarse o Butanol – AcH (99 – 1) ó Metanol – NH3 (99 – 1).
Los cromatogramas deben efectuarse
simultáneamente con testigos de los distintos grupos de drogas mencionadas en
cada caso que sirvan de orientación para su individualización posterior. Debido a que se desconoce la concentración de
los eventuales tóxicos presentes es recomendable sembrar al menos tres puntos
de la muestra, utilizando distintas cantidades de la misma para asegurarnos
entrar en el rango adecuado. Por ej. II gotas, XV gotas y L gotas.
Una vez efectuados los corrimientos,
se marca el frente del solvente, se deja secar adecuadamente la placa y se
efectúan los revelados correspondientes de manera de lograr una reacción
cromógena con los tóxicos que permitan su ubicación en la placa para poder
calcular su Rf y también que el color desarrollado sirva de orientación para la
individualización de las sustancias o al menos de a que grupo de los
mencionados pueda corresponder.
Se debe tener en cuenta que dado el
carácter secuencial de la técnica las distintas aspersiones que realizarán
deben efectuarse con mucho cuidado y permitiendo el secado entre uno y otro
para evitar lo que denominamos “ el derrumbe de la placa” con la consiguiente inutilización de la misma.
Para los tóxicos del grupo “éter de Petroleo”, una vez realizado
el corrimiento cromatográfico se procede a marcar el frente de solvente y a
continuación se realiza el revelado por aspersión secuencial,
a)
Con Solución alcohólica de Difenilamina,
con posterior exposición a la luz UV, de ese
modo se ponen en evidencia los pesticidas
organoclorados por la aparición de unas manchas de color azul violáceo. A
continuación se deja secar la placa.
b)
Se realiza una nueva aspersión, esta
vez con solución de Cloruro de Paladio en ácido clorhídrico al 10 %, de este
modo se revelan los pesticidas
organofosforados que aparecen como manchas amarillo castañas.
Para los tóxicos del grupo “éter ácido”, una vez efectuado el
corrimiento cromatográfico y marcado el frente del solvente, se efectúa el
revelado secuencial como sigue:
a)
Sol. de Acetato de Cobalto al 0.5 %
en metanol, para poner evidencia los
barbitúricos los que aparecerán como manchas de color lila.
b)
Sol. de Hidróxido de Litio al 0.5 %
en metanol.
c)
Sol.saturada de Nitrato Mercúrico,
que colorea los barbitúricos de color gris,
quedando las glutetimidas e hidantoinas, como manchas blancas sobre un fondo oscuro.
d)
Finalmente una aspersión con
solución acuosa de cloruro férrico al 1 % sirve para evidenciar los analgésicos
como manchas de color anaranjado-rojizo (Acido acetilsalicilico)
Finalmente para los
tóxicos del grupo denominado “éter
alcalino”, luego de efectuar el
corrimiento cromatográfico se efectúa la siguiente secuencia de aspersiones:
a)
2-4 dinitrofluorbenceno al 0.5 % en
etanol, con este se evidencian las anfetaminas
que se colorean de amarillo,
sobre un fondo del mismo color.
b)
Sol. concentrada de ácido fosfórico,
de esta manera se decolora la placa que vuelve a su original color blanco, quedando las manchas amarillas de las anfetaminas si es que están presentes.
c) Con solución de ácido clorhídrico al 10 %. Luego se expone la placa al
UV y de haber benzodiacepinas
presentes aparecerán con una fluorescencia
azulada.
d) Rvo. de Marquis, que consiste en una solución de formol en ácido
sulfúrico concentrado, con el cual los alcaloides
morfiólicos adquieren una clásica coloración violeta.
e) Rvo.naftoquinonsulfonato de sodio (NQS), con el cual los anestésicos sintéticos (novocaína, xilocaína, benzocaína, etc.) desarrollan una coloración anaranjada rojiza.
f) Rvo. de Draggendorf o Rvo. Iodoplatínico, con el cual todos los alcaloides y/o sustancias psicotrópicas dan manchas de color rojo o violáceo
Debe tenerse en cuenta que esta
técnica debe utilizarse solamente a título de rastreo inespecífico, las
sustancias que se detecten deben posteriormente ser correctamente identificadas
mediante corrimientos cromatográficos específicos, es decir con solventes y
testigos adecuados para la resolución e identificación de una determinada
sustancia en un grupo de drogas.
De todos modos actualmente la
identificación se efectúa mediante alguna técnica instrumental que permita
obtener el espectro de la sustancia investigada, siendo las más comunes en otras: Espectrofotometría UV, IR, Espectrografía de Masa o Resonancia nuclear
magnética
si el valor de arsenico en una exhumacion al vapor es en uñas de 0.784 ug/L, y en cabello 0.584ug/L es positivo, gracias por tu ayuda
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